Es un salmorejo muy particular, pero fino y sutil, al que hay que saber reducir el sabor a tubérculo de la remolacha.
Ingredientes:
- 2 remolachas grandes cocidas (o 3 pequeñas). Se pueden comprar en cualquier supermercado.
- 6 tomates de pera maduros y pelados
- 1 diente de ajo.
- 1 vaso de aceite de oliva virgen extra (de los de caña. Unos 200 ml)
- 1/2 bollo mediano (a ser posible que el pan esté bien asentado)
- 3 cucharadas soperas de vinagre.
- Sal