Alubias verdinas con almejas de Carril y langostinos

Las alubias verdinas son especiales, delicadas y exclusivas por su escasa producción y muy demandadas en las mejores cocinas por su fina piel y su mantecosidad. Además, su capacidad para absorber los líquidos de la cocción, acumulan en ellas sabores y aromas de todo aquello que las acompañe. Lee este artículo para saber más.

 Ingredientes:

• Aceite de oliva virgen extra
  
• 500 gramos de alubias verdinas  
  
• 12 ó 15 langostinos
  
• 300 gramos de almejas de Carril
  
• Una cebolla
• Una zanahoria
  
• Un pimiento verde italiano (no de asar)
  
• Un trozo de pimiento rojo 
• 6 ajos
• Una cucharada de pimentón dulce 
• Azafrán en hebras o colorante
• Un toque de cúrcuma 
• Pimienta negra en grano
• Una hojita de laurel (opcional) 
• Perejil
  
• Sal 
  

Elaboración:

Poner las alubias verdinas en remojo la noche antes de cocinarlas.   

Al día siguiente, tirar el agua y echar las alubias en una olla. Añadir agua limpia hasta sobrepasar dos dedos por encima de las alubias.

Trocear los pimientos en cuatro, cortar las cebolla en gajos grandes y la zanahoria en rodajas gorditas. Echar toda esta verdura en la olla y 4 dientes de ajo enteros. Poner a cocer dejando que hierva.   

Una vez que empieza a hervir, espumar con una espumadera o con un cazo, como ves en la foto.

 

Agregar el pimentón, el azafrán en hebras o el colorante, un toque de cúrcuma, unos granos de pimienta, una ramita de laurel (opcional) y sal. Cocinar durante 3 horas más o menos. Si quieres tardar la mitad tiempo, te recomiendo que hagas el guiso en una olla a presión con válvula y a fuego medio bajo. Comprobar que las alubias están tiernas y probar de sal. A medida que se va consumiendo el caldo, hay que ir echando agua fría, rompiendo así el hervor.

Mientras el guiso se cocina, pelar los langostinos y reservar las cáscaras y las cabezas. En una sartén, poner un chorrete de aceite. Echar los langostinos, sazonar, picar en láminas un diente de ajo y saltear durante un minuto. Sacar y reservar.

En la misma sartén, echar las almejas bien lavadas y dejar que se abran. Agregar los langostinos salteados. Remover y reservar todo, incluido el caldo de las almejas.

En esta misma sartén, echar un chorrito de aceite, picar otro diente de ajo, echar las cáscaras y las cabezas de los langostinos y sazonar. Refreír durante un par de minutos y añadir un vaso de de agua. Dejar cocer durante dos o tres minutos.

Colar el caldo. Presionar las cáscaras y las cabezas refritas de los langostinos con ayuda de una cuchara para sacar todo su jugo. Reservar.

Una vez las alubias tiernas, agregar los langostinos y las almejas que habíamos reservado con el caldo de su cocción. Añadir también el caldo del refrito de los langostinos con todo el jugo que le hemos sacado.

Cocinar todo junto durante un par de minutos. Probar de sal. Si el caldo te resulta muy espeso, echar un poquito de más agua fría.

Apagar el fuego, rocíar con perejil picado y dejar atemperar para servir el plato.